giovedì, agosto 27, 2009

mi playa

La ‘familia’ (mejor podríamos llamarla reunión) de la mesa de al lado del chiringuito se compone de:
- dos extranjeros de unos cincuenta años, que esbozan unos planos en unos folios sueltos.
- una extranjera con bañador negro, colgante étnico, gafas de sol oscuras y pelo corto cobrizo, a la que de vez en cuando los dos anteriores le enseñan y explican los esbozos.
- una pareja joven con su hija de pocos años.
- otra extranjera con el pelo rizado oscuro, alta, delgada y toda vestida de blanco.
- dos chicos jóvenes con pinta de drogarse abundantemente.
- un español lleno de tatuajes y con varios piercings que pasa siete meses en el extranjero: India, Birmania... comprando cosas que luego vende durante el resto del año, que pasa en la playa, aunque a principio de verano lo vieron regalando todo lo del puestecillo porque estaba arto.

Nos damos cuenta de que están celebrando un cumpleaños, porque después de comer, mientras cantan una especie de cumpleaños feliz ¿en alemán? sacan una tarta. Cuando terminan, vuelven a cantar cumpleaños feliz, esta vez en español, acompañados de uno que toca la trompeta.
Mientras devoran la tarta, el de la trompeta se mete en el chiringuito y empieza a sonar música pasada de moda, y una tras otra, van sonando todas las canciones de Matt Monro... con el mar de fondo, la arena bajo los pies, más gente de la que me gustaría y la suficiente como para dejarme disfrutar del momento.