mercoledì, febbraio 07, 2007

oidos mudos

Te escucho aun cuando guardas silencio, cuando callas y estás como ausente. Escucho tu voz, que viene y va de mi boca a mi cintura, y se pasea estremeciéndome todo el cuerpo. Mientras dice tan poco, tu voz dice tantas cosas que solo puedo entender algunas. A veces eres críptico, oculto debajo de la sombra de mil palabras, de mil renglones que se me clavan como cuchillos, que duelen durante un rato y al rato siguiente me hacen sentir, sentirme vivo. Un día quise saber que había detrás de tu fachada de letras, y al otro decidí no querer saber. Algunos viven tan bien en la ignorancia que me dio por probar. No me va mal, pero tampoco me convence; porque algunos días la ignorancia provocada me duele como me duelen tus largos silencios. Hay días en los que intento hacerme el tonto, taparme los oídos, intentar que ni tu voz ni tus silencios, llenos de palabras, lleguen a mí. Y al final siempre termino cediendo, abriendo: oídos, puertas y ventanas; y dejando que un torbellino de colores, desde el más vivo al más muerto, entre por todas partes para salir descolorido. Porque no lo niego, de ti lo quiero todo: todos los grises que van del negro al blanco; todos los sabores de tu boca; todos los estados que hay entre la miseria y la felicidad… todos esos estados que sin saberlo me provocás.

6 commenti:

Pedro-Abeja ha detto...

Muchas veces queremos hacernos los tontos, hacer como que no nos damos cuenta de lo que pasa y dejarnos llevar simplemente por la parte buena del asunto... pero cd uno está interesado de verdad, no se puede porque se quiere todo, todo, todo. Porque en el fondo todos somos masoquistas y el dolor que el amor causa tb forma parte de su placer. Porque las heridas que provoca nos recuerdan que tdv estamos capacitados para sentir.

Muchos besos, bonito!

Pedro-Abeja ha detto...

Por cierto, bonito título... :P

Otro beso.

Mi misma ha detto...

esas historias que tantos conocemos tan bien... cuando sabes que la otra persona te hace mal, y asi y todo seguis, aun caminando entre espinas, haciendo de cuenta que no duelen, solo porque no tenemos el valor de renunciar. porque la otra persona asi como te hace mal, al mismo tiempo te hace bien... y preferimos quedarnos asi, en ese sufrimiento feliz. es tan rara la vida, es tan complicado a veces. pero es asi, cuando queres a alguien, queres incluso esos momentos en los que no te gusta como te trata, en los que no sabes que te quizo decir, aun sin decirte nada. entre querer descifrar sus silencios y no querer saber por miedo a que sea ESO que nosotros pensabamos...
es que como dice arjona: "quererte a ti me hace sufrir, que buena suerte, para acordarme que estoy vivo..." (un poco lo que dice pedro, cuanta razon tienes!!)
yo en lo personal voy asi, haciendo de cuenta que no la escuche, que me crei las mentiras que me dijo para seguir teniendome amarrada... porque como digo yo en este caso: "de boluda tengo solamente la cara, que me haga la boluda... es otra cosa"
una vez mas me indentifico con lo que tu andas pasando, sera que a todos alguna vez no ha pasado, bueno niño, te dejo muchos besos... y nos estamos hablando!!

pontileon ha detto...

es mejor lo malo conocido que lo bueno por conocer...pero siempre echando un ojo al burro y otro al gitano.
beijos lusos de bilbao

Vulcano Lover ha detto...

El magnífico estupor de la existencia...

Como dijo Cernuda:
"Si no te conozco, no he vivido; si muero
sin conocerte, no muero, porque no he vivido."


Besos, guapo.

Anonimo ha detto...

Demasiado profundo para mi estos días.
Hago oidos mudos.